Tras la movilización realizada este lunes, la Central Obrera Boliviana (COB) anunció que activará un cerco a la plaza Murillo como parte de sus medidas de presión contra el Decreto Supremo 5503. Pese a esta determinación, la dirigencia confirmó que recibió una invitación del Gobierno para entablar un diálogo, la cual será analizada junto a sus bases.

El anuncio fue realizado por el ejecutivo de la COB, Mario Argollo, quien emitió declaraciones en inmediaciones de la plaza Murillo, zona que permanece resguardada por un contingente policial. El dirigente señaló que la medida de cerco busca presionar al Ejecutivo para que abrogue el decreto, al que calificó como perjudicial para los sectores más vulnerables.

Argollo indicó que, si bien existe una convocatoria oficial del Gobierno para una reunión, la dirigencia no tomará decisiones de manera unilateral. Aseguró que la invitación será evaluada en una reunión ampliada con las federaciones y regionales afiliadas a la COB, respetando la decisión orgánica de las bases.

La Central Obrera Boliviana se encuentra en paro general indefinido en rechazo al Decreto 5503, argumentando que la norma afecta a la población de menores recursos y compromete los intereses nacionales. Durante la movilización, los afiliados también enfrentaron cuestionamientos de ciudadanos que respaldan las medidas económicas adoptadas por el Ejecutivo.

En sus declaraciones, el dirigente sindical cuestionó la postura del presidente Rodrigo Paz, señalando que las decisiones asumidas contradicen los compromisos asumidos con los sectores populares durante la campaña electoral.