El Gobierno alcanzó este domingo un acuerdo con la Federación Departamental de Cooperativas de Transportes de Cochabamba (Fecotrac), por lo que esta organización decidió suspender las medidas de presión que había anunciado contra el Decreto Supremo 5503.

Los dirigentes del transporte cooperativizado se reunieron con el ministro de Economía, José Gabriel Espinoza, y el ministro de Defensa, Marcelo Salinas, con quienes firmaron el acuerdo que establece la instalación de mesas de trabajo y un cuarto intermedio en las protestas.

El dirigente Orlando López informó que, tras el acuerdo, se dejó sin efecto el bloqueo de carreteras que estaba previsto desde el martes 23 de diciembre. “Dejamos sin efecto las medidas de tomar un bloqueo desde el martes a las cero horas. Por el acuerdo, cuarto intermedio para la implementación, se van a hacer mesas de trabajo y no vamos a ir a ningún paro ni bloqueo de carreteras”, señaló.

Fecotrac había declarado el pasado jueves un paro con bloqueos en rechazo al Decreto Supremo 5503; sin embargo, luego del encuentro con las autoridades nacionales, se determinó suspender esta medida de presión.

López reconoció que el decreto fue una medida dura, pero afirmó que será importante para evitar la escasez de combustible. En ese sentido, señaló que el sector participará en las mesas de trabajo acordadas con el Gobierno.

Por su parte, el ministro de Defensa, Marcelo Salinas, agradeció el respaldo del sector cooperativista y aseguró que los problemas del transporte serán atendidos de manera progresiva. Indicó que durante 20 años no se resolvieron las dificultades del sector y defendió el Decreto Supremo 5503, señalando que contribuirá a mejorar la situación económica del país.

El ministro de Economía, José Gabriel Espinoza, reiteró que el Decreto Supremo 5503 no será anulado, argumentando que es una norma necesaria para la economía nacional. El decreto establece una serie de medidas económicas, entre ellas nuevos precios para los combustibles.

Pese al acuerdo con los cooperativistas de Cochabamba, sectores del transporte federado y la Central Obrera Boliviana (COB) mantienen su rechazo a la norma, mientras el Gobierno aseguró que no dará marcha atrás en su aplicación.