El vicepresidente electo, Edmand Lara Montaño, anunció que solicitará a la Policía Boliviana la restitución de su grado de capitán, luego de que un fallo constitucional anulara la resolución que dispuso su baja definitiva en 2024 por presuntamente incumplir una “orden ilegal”. Aclaró que su intención no es volver al servicio activo, sino recuperar su honor y cerrar su carrera policial con dignidad.

“Entré a la Policía por la puerta grande, venciendo los exámenes, no por influencias como otros. Quiero salir por la misma puerta, con mi grado restituido. No he cometido ninguna falta; solo cumplí la ley y me negué a liberar a personas protegidas por el coronel Ortuño”, señaló Lara.

El vicepresidente electo explicó que su baja fue producto de represalias internas tras negarse a liberar a un ciudadano presuntamente vinculado al entonces comandante de la Policía Fronteriza de San Ignacio de Velasco, Jhonny Ortuño, durante un Auto de Buen Gobierno en 2020. Aseguró que Ortuño manipuló procesos disciplinarios en su contra, lo que derivó en sanciones y finalmente en su separación de la institución.

En 2023, Lara presentó una acción de amparo constitucional que fue favorable, anulando la resolución que confirmó su baja y ordenando la reposición del proceso con respeto a su derecho a la defensa. Sin embargo, el Tribunal Disciplinario aún no reinstaló la audiencia correspondiente.

“Como vicepresidente electo, quiero cerrar mi carrera policial con dignidad: que se me restituya el grado, que se respete mi derecho, y luego presentar mi baja voluntaria”, afirmó.

Lara adelantó además que iniciará un proceso legal contra el coronel Ortuño por los daños que —según dijo— le causó tanto a él como a su familia. “Me destruyó la vida por negarme a cumplir una orden ilegal”, enfatizó.