La Comisión Europea anunció este jueves que Bolivia fue incluida en su lista de países de alto riesgo en materia de blanqueo de capitales y financiación del terrorismo. La decisión surge tras la actualización realizada por el Grupo de Acción Financiera Internacional (FATF, por sus siglas en inglés), que ubicó a Bolivia entre los países bajo mayor supervisión.

El organismo europeo reconoció que Bolivia ha mostrado compromiso y avances para atender las observaciones emitidas por la FATF; sin embargo, consideró que el país aún no ha subsanado completamente las deficiencias estratégicas detectadas en su sistema contra el lavado de activos.

Entre los aspectos pendientes se encuentran el uso efectivo de técnicas especiales de investigación en casos de blanqueo, la supervisión basada en riesgos de agentes inmobiliarios, abogados, contadores y comerciantes de metales y piedras preciosas, además de la necesidad de garantizar información precisa y actualizada sobre los beneficiarios finales.

El documento señala que, aunque se valoran los avances, “estos no son aún suficientes”, por lo que la Comisión concluyó que Bolivia debe ser considerada un país tercero de alto riesgo. En esta actualización también fueron incluidas las Islas Vírgenes Británicas.

La incorporación a esta lista implica que las entidades reguladas en Europa deberán aplicar controles reforzados cuando realicen operaciones vinculadas con los países señalados como de alto riesgo.