El Defensor del Pueblo, Pedro Callisaya, expresó su preocupación sobre el rol que podría desempeñar el Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP) en las próximas elecciones generales.

En una entrevista con la red ERBOL, Callisaya afirmó que para evitar injerencias que afecten el proceso electoral, es necesario un acuerdo nacional entre los actores políticos.

“Debemos evitar que el TCP se convierta en un actor nocivo, como ocurrió en las elecciones judiciales, donde retrotrajo etapas, anuló principios de preclusión y limitó postulantes”, señaló Callisaya, subrayando que la democracia es la única vía para garantizar la convivencia pacífica en el país.

Al evaluar el año 2024, Callisaya calificó la situación de los derechos humanos como “no positiva” debido al debilitamiento institucional que ha derivado en una crisis de confianza.

Mencionó, además, que este escenario afecta al sistema judicial, donde magistrados elegidos en 2017 convivirán con los designados en 2024, reflejando una parcialización en los procesos electorales.

El Defensor del Pueblo también enfatizó que las elecciones generales del próximo 10 de agosto deben regirse estrictamente por los lineamientos de la Constitución Política del Estado.

Según él, garantizar la transparencia y la institucionalidad es fundamental para proteger los derechos de los ciudadanos.

Finalmente, Callisaya instó a los políticos y autoridades a priorizar el fortalecimiento de la democracia, advirtiendo que cualquier salida no democrática pondría en riesgo tanto la institucionalidad del país como los derechos de los bolivianos.