Varias cisternas cargadas de gasolina y diésel permanecen en fila a la espera de ingresar a la planta de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) en Puerto Villarroel, en el trópico de Cochabamba, para realizar la descarga de combustible. De acuerdo con los conductores, algunos vehículos llevan hasta tres días esperando su turno.

Durante un recorrido por el sector, se pudo observar una gran cantidad de carros cisternas estacionados en inmediaciones de la planta, aguardando autorización para ingresar a las instalaciones. En contacto con los choferes, estos señalaron que llegaron desde Argentina con cargamentos de diésel y gasolina, pero hasta el momento no han podido realizar la descarga correspondiente.

Según la versión de los conductores, los tanques de la refinería estarían llenos, por lo que deben esperar a que se vacíen para permitir el ingreso de nuevas cisternas. En ese contexto, presumen que la demanda de combustible en las estaciones de servicio del departamento habría disminuido, lo que explicaría que los tanques de almacenamiento permanezcan colmados.

Ante esta situación, las cisternas deberán continuar en espera hasta recibir la autorización para ingresar a la planta y descargar el combustible transportado. Hasta el cierre de esta información, se aguardaba una postura oficial por parte de YPFB respecto a esta situación.

Cabe recordar que, hace aproximadamente una semana, el Gobierno promulgó el Decreto Supremo 5503, que establece la eliminación de la subvención a los hidrocarburos y nuevos precios para los combustibles, una medida que ha generado opiniones divididas a nivel nacional.