Una multitud vestida de rojo, amarillo y verde colmó este martes los alrededores del estadio Municipal de Villa Ingenio en El Alto para alentar a Bolivia en su duelo decisivo frente a Brasil por la clasificación al repechaje del Mundial 2026.

El repechaje, en disputa directa con Venezuela, tendrá un formato inédito de hexagonal intercontinental en marzo próximo, con la participación de una selección de África, una de Asia, otra de Oceanía y dos de la Concacaf.

Hinchas de todas las regiones del país llegaron con anticipación para superar los controles de acceso y encontrar un lugar desde donde apoyar a la Verde.

Entre ellos, Mohamed Navil, que viajó desde Santa Cruz, expresó su ilusión con un pronóstico de 4-2 a favor de Bolivia y destacó al juvenil Miguel Terceros, autor de seis goles en estas eliminatorias.

Otro fanático, Danko Domínguez, viajó desde Guayaramerín, Beni, confiando en la ayuda de Colombia para frenar a Venezuela. Mientras que Benito Fernández, alteño, ondeó once banderas —de Bolivia, de las nueve regiones y de la ciudad de El Alto— convencido de que los jóvenes de la selección demostrarán su capacidad ante el campeón mundial.

Bajo la dirección de Óscar Villegas, Bolivia llega con la esperanza intacta y recuerdos de la histórica clasificación a Estados Unidos 1994, cuando la Verde venció 2-0 a Brasil en La Paz. Hoy, Villa Ingenio se convirtió en el nuevo fortín en el que todo un país sueña con repetir la hazaña.