El diálogo entre el Gobierno y la Confederación Sindical de Choferes de Bolivia (CSCB) sobre la escasez de combustibles se tornó tenso y terminó con la expulsión del presidente de la Administradora Boliviana de Caminos (ABC), Marcel Claure.

Los transportistas exigieron su salida entre gritos y reclamos por el mal estado de las carreteras. “¡Fuera, fuera, fuera!”, coreaban los choferes hasta que Claure dejó la reunión.

Además de la falta de combustibles, los transportistas expresaron su preocupación por el aumento en los precios de los repuestos y el encarecimiento de la canasta familiar.

Por otro lado, en La Paz, a pesar de que la Alcaldía aprobó un incremento en los pasajes de Bs 1 a Bs 2,40, los choferes ratificaron un paro de 48 horas desde el lunes.

“Ratificamos el paro de 48 horas. Hoy estamos asistiendo por respeto a la Confederación de Choferes, pero no hablamos de suspensión”, afirmó Edson Valdez, dirigente de los choferes paceños.

Las juntas vecinales han denunciado que, pese al incremento tarifario, el servicio de transporte no ha mejorado y los trameajes continúan afectando a los usuarios.