Tras décadas de éxito por separado, los íconos del cine compartieron pantalla y dejaron atrás antiguas fricciones

Durante más de treinta años, Brad Pitt y Leonardo DiCaprio han brillado como dos de los actores más reconocidos del cine estadounidense. Aunque sus trayectorias se desarrollaron en paralelo, su colaboración en pantalla no se concretó sino hasta 2019, cuando protagonizaron Había una vez en Hollywood, bajo la dirección de Quentin Tarantino. La química entre ambos fue tan notable que evocó a las grandes duplas del cine clásico como Paul Newman y Robert Redford.

Pitt se consolidó en los años 90 con cintas como Leyendas de pasión, Entrevista con el vampiro, 12 monos, Seven y El club de la pelea. En tanto, DiCaprio conquistó a la crítica y al público tras su éxito en Titanic (1997) y su continua colaboración con Martin Scorsese en películas como Gangs of New York, El aviador e Infiltrados.

La colaboración en Había una vez en Hollywood fue un punto de inflexión. Brad Pitt interpretó a Cliff Booth, un doble de acción y fiel amigo del actor Rick Dalton, encarnado por DiCaprio. El filme no solo fue un tributo al Hollywood de los años 60, sino también un testimonio del talento combinado de dos leyendas vivientes.

No obstante, no todo fue armonía entre ambos en el pasado. En la década de los 90 circularon rumores sobre diferencias personales, especialmente luego de la ruptura de Pitt con Gwyneth Paltrow. Algunos medios incluso especularon que Pitt habría solicitado una orden de alejamiento contra DiCaprio, versión que nunca fue confirmada.

Durante la promoción de Había una vez en Hollywood, un periodista revivió el tema, y Brad Pitt respondió con ironía: “Sí, tuve una orden de alejamiento contra él durante un tiempo... por un incidente de 1994 del que no nos gusta hablar”. Aunque dicho con humor, el comentario dio a entender que cualquier rencilla quedó atrás.

En medio de esta historia de reconciliación y colaboración, otra figura importante en la vida profesional de Pitt también salió a relucir recientemente: Tom Cruise. Durante su participación en CinemaCon, Cruise reveló una curiosa anécdota sobre su tiempo junto a Pitt en el rodaje de Entrevista con el vampiro (1994). Contó que solían relajarse por las noches compitiendo en carreras de go-karts. “Es un muy buen conductor. Créeme, he corrido contra él”, afirmó entre risas.

Cruise aprovechó la ocasión para expresar su entusiasmo por F1, la nueva película protagonizada por Pitt, donde interpreta a un ex piloto de Fórmula 1 que vuelve a las pistas como mentor de un joven talento. El filme, dirigido por Joseph Kosinski y producido por Jerry Bruckheimer, se estrenará este verano.

Años después de los rumores y distancias, tanto Brad Pitt como Leonardo DiCaprio demuestran que en Hollywood las segundas oportunidades no solo son posibles, sino que pueden convertirse en icónicos momentos cinematográficos.