Ramiro Vaca retomó este jueves los entrenamientos con Bolívar luego de seis meses alejado de las canchas.

El volante tarijeño regresó a La Paz y se reincorporó al plantel celeste, aunque recién podrá disputar un partido oficial a partir del 12 de enero de 2026, debido a la sanción impuesta por la Conmebol tras un resultado positivo en un control antidopaje.

El examen se realizó el 7 de mayo, después del encuentro que Bolívar jugó ante Sporting Cristal en Lima por la Copa Libertadores. Días más tarde, el futbolista fue suspendido de manera provisional tras detectarse ostarina en su muestra, en una cantidad mínima. La dirigencia presentó su defensa y demostró que el consumo fue accidental por un suplemento contaminado, pero el 15 de octubre la Comisión Disciplinaria de la Conmebol ratificó la sanción de ocho meses, contados desde la fecha del control.

De acuerdo con la resolución, Vaca puede entrenar desde el 12 de noviembre, pero solo estará habilitado para competir oficialmente desde el 12 de enero. El jugador arribó al aeropuerto de El Alto este jueves, donde evitó brindar declaraciones y señaló que el club organizará una conferencia de prensa para el lunes. Agradeció el apoyo recibido durante su suspensión y expresó su satisfacción por volver al trabajo con el plantel.

El mediocampista se reincorporó al Centro de Alto Rendimiento de Ananta, donde fue recibido con muestras de respaldo por parte de sus compañeros y del cuerpo técnico. Aunque ya practica con normalidad, su regreso a la competencia oficial aún deberá esperar.

En octubre, el seleccionador nacional Óscar Villegas anticipó que el volante será invitado a los entrenamientos de la Verde antes del amistoso frente a Perú, programado para el 21 de diciembre en Tarija. El entrenador también confirmó que Vaca será considerado para los encuentros de enero ante Panamá, Tanzania y República Dominicana.